Los corticoesteroides tópicos (CT) vienen utilizándose en el tratamiento de enfermedades inflamatorias de la piel desde 1952. A pesar de la introducción de otras sustancias antiinflamatorias, como los inhibidores tópicos de la calcineurina para la dermatitis atópica, los CT resultan indispensables en el tratamiento dermatológico y son el medicamento tópico más recetado.
Se ha avanzado en el desarrollo de nuevas formulaciones galénicas. La elección del vehículo óptimo es relevante para lograr un tratamiento tópico eficaz, ya que puede afectar a la potencia de los CT, tener efectos directos sobre las dermatosis e influir en la aceptación y, por tanto, en el cumplimiento del tratamiento por parte del paciente.
En conjunto, los CT siguen siendo los compuestos más importantes para el tratamiento de las enfermedades inflamatorias de la piel. El desarrollo de CT modernos y de nuevas formulaciones, así como la tendencia hacia un tratamiento proactivo y de mantenimiento, han aumentado significativamente la relación entre beneficio y riesgo y, por tanto, la importancia de los CT en dermatología.
